Testimonio Marta Margarit | 25 años
Es increíble pensar cuantas cosas se pueden hacer en tan solo un año. Mirando algunas fotos para añadir en mi historia me he dado cuenta de todo lo que he hecho durante este año de EVS en Jena.
Jena es una ciudad pequeña en Alemania, pero pequeña no significa que no haya mucho por hacer. En realidad, es lo contrario. Jena como ciudad es pequeña, pero desde ella puedes llegar en bici muy fácilmente a cualquier otro pueblo o ciudad cercanos. ¡Nunca antes había ido tanto en bici!
Hemos vivido 9 voluntarios de la asociación Eurowerkstatt en el mismo edificio. Jóvenes de Rusia, Turquia, Francia, Bielorusia y España. Eso ha hecho que algunas cosas fueran más fáciles. Por ejemplo, tener nuevos amigos desde el principio y no sentirse solo en un nuevo país. Hemos hecho algunas actividades juntos como excursiones por la montaña, picnics en el parque, barbacoas en el jardín, salidas en bicicleta… No siempre íbamos todos los voluntarios juntos pero estaba bien saber que estaban cerca para cualquier cosa.
Mi proyecto de EVS ha sido en un kindergarten, el kindergarten de la “JenaPlan Schule” de Jena, donde he tenido una experiencia muy buena. En este kindergarten usan diferentes métodos pedagógicos a los convencionales. Yo estudié pedagogía así que, pude ver y aprender muchísimo sobre educación. Me sorprendí mucho al ver que niños de diferentes edades (2-6 años) aprenden juntos los unos de los otros. También he aprendido alemán claro. Todos los niños me han ayudado mucho ya que sabían que yo no conocía el idioma. Era muy divertido y bonito ver como los niños me ayudaban a entender lo que me querían decir haciendo mímica, hablando súper despacio, haciendo gestos exagerados o corriendo a buscar a alguien que pudiera traducir.
Durante este año he viajado más que nunca. He tenido la oportunidad de viajar a los países vecinos de Alemania y a algunas ciudades alemanas durante mi tiempo libre y vacaciones. También viajé por los seminarios con algunos de los voluntarios de Eurowerkstatt. Allí pudimos conocer a otros jóvenes que estaban viviendo las mismas experiencias que nosotros pero en otros lugares de Alemania. En los seminarios aprendimos sobre el programa de EVS y otras muchísimas cosas interesantes ¡además de realizar diferentes actividades divertidas como ir en canoa o una noche de karaoke! Me llevé a algunos buenos amigos de estos seminarios a quienes he podido ir a visitar.
Después de este año, voy a volver a España. Mi plan es buscar trabajo y más adelante seguir estudiando. Estoy segura que nunca voy a olvidar este año tan increíble y toda la experiencia ganada en el kindergarten, en la casa conviviendo con jóvenes de otros países y de mi día a día en Alemania.
